La Cámara Alta aprobó este jueves un amplio proyecto de ley de legalización del cannabis. La iniciativa allana el camino para la creación del mercado legal de marihuana más grande del mundo, siempre y cuando sea aprobada también en la Cámara Baja.}
Un paso histórico para uno de los países más golpeados por el narcotráfico. Este 19 de noviembre el Senado mexicano aprobó una ley federal que legaliza el cultivo, la producción, el consumo, la distribución, la industrialización y la venta de la marihuana bajo control federal.
La Cámara Alta aprobó la normativa con una amplia mayoría de 82 votos a favor, 18 en contra y siete abstenciones. El principal opositor fue el derechista Partido Acción Nacional (PAN), que acusó al partido de Gobierno, principal impulsor de la nueva ley, de atentar «contra las familias».
Por su parte, la senadora Imelda Castro del gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena), aseguró que la aprobación del proyecto supone «un gran momento histórico para hacerle justicia a los pueblos que perdieron tantos seres humanos en la mal llamada guerra contra las drogas».
La Suprema Corte de Justicia del país declaró en 2019 inconstitucional la prohibición absoluta de la marihuana lúdica y ordenó al Congreso mexicano regular el uso recreativo de la marihuana antes del 30 de abril, sin embargo, los legisladores pidieron una prórroga por la pandemia y obtuvieron un plazo definitivo hasta el 15 de diciembre.
Pero para que la ley sea aprobada, esta aún necesita tener el visto bueno de la Cámara de Diputados. Eso podría ocurrir antes de fin de año ya que Morena cuenta con mayoría en ambas Cámaras.
En caso de aprobarse la normativa, la reforma marcaría un cambio importante en un país donde la violencia de los carteles de la droga en los últimos años ha cobrado más de 100.000 vidas.
«Es muy difícil regular súbitamente un tema tan delicado»
La ley trae consigo reformas que permitirán poseer hasta cuatro plantas por domicilio, autorizará alimentos y derivados con cannabis no psicoactivo, otorgará licencias para siembra, cultivo y cosecha, y garantizará el consumo privado siempre y cuando no haya menores de edad presentes.
Sin embargo, la ley aún contempla sanciones en caso de posesión de más de 200 gramos de cannabis y multas por portar entre 28 y 200 gramos.
«Es muy difícil regular súbitamente un tema tan delicado, en el que se carece de información, de datos sobre el consumo, sobre el uso, justamente porque se trató de una etapa prohibicionista, por eso esta perspectiva de una regulación gradual es para empezar a dar pasos», reconoció Castro.
Por su parte, el partido Movimiento Ciudadano, que apoyó la iniciativa, aseguró que se trata de un paso «de muchos que faltan para alcanzar una política de drogas que abandone completamente el uso del sistema de justicia penal, que criminaliza a los consumidores y enriquece a los traficantes».
Sin embargo y pese al amplio consenso respecto a la aprobación de la normativa, así como al impulso dado por la Suprema Corte, algunos sectores aún se muestran reticentes por considerar que la iniciativa abre «la puerta de las drogas» a menores de edad, a pesar de que esta prohibe que los menores consuman, estén presentes durante su consumo o compren o vendan la sustancia
Con información de Reuters