Las olimpiadas en Tokio 2020 sufrieron un retraso por consecuencia de la pandemia C0vid-19. Pero han sido unas Olimpiadas únicas ya que hay muchas cosas que por primera vez pasan. Se han estrenado cinco deportes nuevos como disciplinas olímpicas. Karate, Skateboarding, Escalada Deportiva, Surf, y Basketbal 3 x 3 y también es la primera vez en el cual el CBD no es considerado como sustancia prohibida por el Comité Olímpico Internacional.
Desde 2018, la Asociación Mundial Antidopaje sacó de la lista de sustancias prohibidas el Cannabidiol, pero solamente el CBD de los más de 400 cannabinoides conocidos esta permitido.
Lo que significa que el consumo de marihuana o cannabis sigue prohibido. El ejemplo es el caso de la corredora olímpica Sha Carri Richardson que dio positivo al THC.
La Agencia Mundial Antidopaje, AMA, hace tanto énfasis en esta división que incluso otorga a los cannabinoides su propia categoría en la lista de sustancias, los grupos son: estimulantes, narcóticos, glucocorticoides y los cannabinoides.
El CBD es el único cannabinoide excluido y su uso entre deportistas no es nuevo, en lugares donde es legal su consumo, como Estados Unidos, las ligas como la NFL o la UFC permiten a sus jugadores usar este cannabinoide para reducir los efectos en el cuerpo de la práctica de estas disciplinas de alto impacto. Gracias a su efecto antiinflamatorio y analgésico, el CBD se ha convertido en una de las terapias de recuperación que más popularidad han adquirido entre deportistas.
De acuerdo con una encuesta hecha por la agencia especializada en cannabis, New Frontier Data, 2% de los consumidores de CBD en el mercado europeo buscan este cannabinoide únicamente por sus beneficios a la hora de hacer ejercicio. Ya sea a través de cremas, vaporizadores, aceites comestibles o con parches transdérmicos, de los deportistas europeos que toman CBD, 40% lo hace para manejar algún tipo de dolor, 31% para mejorar la calidad del sueño y 26% para reducir la ansiedad, todos estos factores han demostrado tener un impacto positivo en el desempeño deportivo.
Durante los Juegos Olímpicos, los atletas que así lo elijan podrán usar CBD para recuperar sus capacidades musculares o para manejar la ansiedad que las competencias puedan producir incluso durante la realización de los eventos, pero deberán tener mucho cuidado con la fuente de donde lo obtengan pues cualquier cantidad de THC detectada en su organismo será equivalente a ser descalificados, por lo que el CBD tiene que ser un cannabinoide aislado y puro.
Fuente: Forbes